martes, 6 de noviembre de 2012

COMENTARIO A TIEMPO
Por Teodoro Rentería Arróyave
CAMBIO EN LA ESTRATEGIA
TAXCO DE ALARCÓN, GUERRERO. El problema más sentido de la población en general, indudablemente es la seguridad, por consiguiente es el reto más significativo de Enrique Peña Nieto, quien asumirá dentro de 24 días la Presidencia de la República y por consecuencia será factor decisivo del futuro de la Nación.
Últimamente han sido motivo de comentarios, de análisis y porque no decirlo de supuestos, las diferentes formas en que el 65º Presidente de México implementará su estrategia para devolverle la paz pública al país.
Nosotros partimos del hecho cierto de que lo más importante para los mexicanos es la pacificación del país, al contrario del gobierno de Felipe Calderón Hinojosa que agoniza, que priorizó la cruenta lucha contra el crimen organizado.
Desde el tiempo de la campaña electoral, Peña Nieto ha insistido en el cambio de estrategia, es decir, dejar el método de la violencia para combatir la violencia que solo produce mas violencia, a cambio de la inteligencia policíaca y si es necesario la militar.
En esas condiciones, se ha insistido en que el equipo de transición está trabajando para constituir un Centro de Inteligencia que agrupe a todas las dependencias encargadas de combatir al crimen organizado.
Sería un instrumento valiosísimo, donde el banco de datos procedentes de toda la República e inclusive del extranjero por colaboración, tendría un solo mando, en otras palabras, sería un organismo poderosísimo bajo un solo jefe rector y con conexión directa y única con el Presidente de la República.
Otro de los puntos cardinales de este nuevo comando de inteligencia, basado en el principio constitucional del federalismo, consiste en que los gobiernos de las entidades tendrán que colaborar con absoluta responsabilidad, so pena de que se les finquen responsabilidades a los titulares de los ejecutivos locales.
Este punto es sumamente importante, porque podría ser el inicio de una nueva política en donde las entidades, por ser administradas por gobiernos de diferentes partidos políticos no se verían como enemigos, por el contrario, como lo ordena la Carta Magna, se respetaría el principio de que el país es un todo e indivisible.
De ninguna manera se trata de violentar la soberanía de los estados, por el contrario, se trata de unir esfuerzos con responsabilidad y compromiso para el bien del país.
Es muy posible, que de acuerdo a los resultados, que esperamos sean muy positivos, la colaboración entre entidades federativas, gobierno federal y entre los mismos estados, fructifique en otras áreas fundamentales para el progreso del país.
México tiene que cambiar y sobre todo en ese rubro de la seguridad nacional, Peña Nieto tiene que dar resultados no a mediano y largo plazo sino de inmediato. En los primeros días debe sentir la población el cambio de estrategia. El gobierno priista, que regresa, venció en las urnas, ahora le toca demostrar que vencerá con los hechos en el ejercicio del poder.
Periodista y escritor. Secretario de Desarrollo Social de FELAP y Presidente fundador y vitalicio honorario de FAPERMEX. Agradeceré Sus comentarios y críticas en
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