miércoles, 23 de febrero de 2011

EPISTOLARIO
Por Armando Rojas Arévalo

La disputa por el poder


SILVIA: Lo que se dijo en el programa "Tercer Grado" del canal 2 de Televisa, transmitido el miércoles pasado -día 16-, develó prácticamente la ruptura entre las empresas de SLIM -Grupo Carso- y el consorcio de AZCÁRRAGA.
Sin necesidad de decirlo tajantemente, los comentarios de los periodistas del panel condujeron al auditorio a pensar que los dos monopolios terminaban sus relaciones. Dos días después, el 18, el consorcio SLIM confirmaba de manera oficial esa sospecha.
Al analizar en uno de los segmentos del programa el regreso de CARMEN ARISTEGUI a MVS Radio, los comentaristas señalaron que la periodista volvía a su programa -del cual fue despedida públicamente, aduciendo faltas al código de ética de la empresa-, por presiones de SLIM a los dueños de MVS, los señores VARGAS, por la disputa de la frecuencia de fibra óptica de la que Yoo (cablevisión) es beneficiaria.
Televisa, Telefónica y Megacable se unieron en marzo del año pasado para obtener la licitación del par de hilos de fibra óptica oscura de la Comisión Federal de Electricidad. En abril, la SCT informó que las tres empresas eran los únicos participantes del concurso y en junio se les aplicó la adjudicación directa por 850 millones de pesos, cantidad mucho menor a los cerca de 2 mil 500 millones de pesos que es el valor real de la fibra óptica licitada (Proceso, No. 1752).
La medida permite a las tres empresas el acceso a transporte de datos y una mayor competencia en el mercado de las telecomunicaciones en México, "y por lo tanto, una mejora en la calidad de los servicios ofrecidos", dijo el comunicado oficial del consorcio.
Televisa y Megacable son socios en Yoo, que ofrece telefonía, internet y televisión por cable. Curiosamente ambas participaron conjuntamente, a cambio de no competirse en la licitación de la banda 1.7 Ghz, conocida como la licitación 21, orientada a beneficiar a Televisa y su socia Nextel.
El 16 de agosto de 2010 la Cofetel aprobó que por 180.3 millones de pesos, la sociedad formada por Televisa-Nextel se quedara con el único bloque de 30 Mhz de cobertura nacional para los servicios de telefonía móvil convergente con el triple play (Yoo). En virtud de los reclamos por las irregularidades cometidas en la licitación, Televisa se deslindó poco después de Nextel, cuyo apoderado legal, por cierto, es el ex secretario de Gobernación, FERNANDO GÓMEZ MONT.
Como dato adicional, la semana pasada el Congreso iba a aprobar un exhorto a la SCT, para reponer la convocatoria de la Licitación 21 y subsanar todo el mal manejo que se le dio al concurso. ¿Quién crees que echó abajo el punto de acuerdo? Nada menos que el senador panista JUAN BUENO TORIO, de no muy buena fama pública en Pemex.
¿Dónde entra CARMEN ARISTEGUI en todo este enredado asunto? Bueno, en la agenda del gobierno federal está pendiente la renovación de la concesión de la mencionada banda de telecomunicaciones. El regreso de ARISTEGUI -recuérdese que hace un par de años, la conductora fue despedida de XEW que pertenece al grupo Azcàrraga- es parte del entramado, pues todos sabemos que MVS tiene participación en la empresa de tv satelital Dish, en la que el Grupo Carso es mayoritario.
Es bien conocido que la empresa Dish, que ofrece servicio de televisión por cable, es propiedad de SLIM, como lo es, también, el monopolio de Teléfonos de México, cuya infraestructura de telecomunicaciones utiliza aquella. La decisión del poderoso Grupo Carso costará a la empresa de AZCÁRRAGA 870 millones de pesos de sus ingresos. Según los consorcios, se trata de un diferendo por tarifas de los anuncios, la realidad es otra: la pelea por las telecomunicaciones, que es un sector altamente redituable económica y políticamente. Por vía de mientras Telmex, Telcel, Sanborns y Sears entre otras, son las firmas que no se promoverán en Televisa.
La ruptura aparentemente no afecta de manera sobresaliente a Televisa…por el momento. Sin duda habrá asociados y amigos de negocios de SLIM que seguirán la pauta.
En el escenario político habrá consecuencias. Los grupos de poder tendrán que reacomodar sus piezas. Los candidatos de uno serán los adversarios del otro.
La disputa entre los dos grandes consorcios es un choque de trenes, en el que también colisionará el Grupo Salinas, que ha interpuesto casi 80 amparos contra las irregularidades de la SCT en la famosa Licitación 21 y de los que, por lo menos, 30 están vigentes. No sería remoto que el Grupo Salinas y Grupo Carso hicieran alianzas estratégicas.
DE OTRAS COSAS, la solicitud de licencia de LÓPEZ OBRADOR ha dividido al PRD. Los Chuchos dicen que no existe la figura de licencia en los estatutos, por lo cual no se la van a conceder; empero, tienen ya listo el obús para expulsar al tabasqueño en el caso de que haga campaña contra el candidato de la alianza PRD-PAN en el Estado de México.
MIENTRAS, el pejista RICARDO MONRREAL AVILA ya aceptó ser candidato del PT a la jefatura del gobierno capitalino. Si a eso le añades que otro pejista, MARTÍ BATRES, buscará lo mismo, el choque de intereses entre AMLO y EBRARD será de pronóstico reservado.
NUEVO GRUPO en el PAN: TCC, Todos contra Cordero. Claro, después de la desbarrada que dio al decir que 6 mil pesos son suficientes para alimentos, casa, carro y escuela privada es como para expresar "ay nanita, no es por ahí".
armandorojasarevalo@yahoo.com.mx

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