viernes, 1 de julio de 2011

Punto de Vista
Mario Tassías


Es probable que para la diputada más joven del Congreso del Estado de Chiapas, menos de dos horas para elegir al dirigente de un partido político nacional, sea mucho o poco tiempo. Es cuestión de precisión.
Para que las abejas depositen la miel en el panal, basta una orden. Bajo el tono de esa voz se hace la luz o predomina la obscuridad. Se dice lo que se tiene que decir y se hace lo que debe hacerse.
Llamarle votación democrática a una simulación de elección, solo demuestra que el ejercicio liberal es retórica. Discurso de enjundia, pero al final amasijo de palabras. Solo palabras.
Las avispas del panal habían decidido los nombres. El avispero solo ratificó.
Luis Castro Obregón y Mónica Arriola Gordillo, son los nuevos flamantes dirigentes del Partido Nueva Alianza para el periodo 2011-2014, presidente él, secretaria general ella. Castro Obregón, tiene como antecedente insuperable para ocupar ese lugar de supremacía, haber sido secretario particular de la lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Arriola Gordillo por ahora, diputada federal, es hija de la dirigente sindical. Los tres forman una familia brillante.
De partido tiene poco, de nueva alianza, mucho menos. La franquicia si tiene nombre comercial, al final de cuenta es el negocio de la casta divina.
Sirve para subastar votos. Para tráfico de influencias. Para hacer negocios. Para comprar y vender en temporadas electorales. Es un feudo con estructura de sociedad anónima, de responsabilidad limitada y capital variable.
Como en el Consejo Nacional Extraordinario de este partido había que elegir algo, los consejeros aceptaron un "acuerdo democrático" entre uno. La resolución tomada desde el trono de la reina era necesaria para deliberar sobre las propuestas contenidas en una sola planilla registrada.
Entre tanto la concurrencia aplaudía, se tomaba fotos para el recuerdo o simplemente admiraba la capacidad organizativa de las huestes de la señora Gordillo. Huelga decir que no hubo elección. ¿Para qué desgastar a la concurrencia? la decisión ya estaba tomada. Para qué importunar con deliberaciones.
En su primer discurso, el nuevo dirigente urgió a la concurrencia a aprobar las reformas estructurales de su partido que aclaró, no es un "partido electorero" y que como "oposición", debe propiciar el diálogo con otros partidos políticos.
Con toda seguridad que al nuevo dirigente, no le avisaron o no se enteró que su patrona había declarado unas horas antes que en 2006 apoyó a Felipe Calderón. No fue con el licenciado "X" (Roberto Madrazo Pintado) porque pesaba la expulsión de su anterior hacienda, y tampoco con Andrés Manuel López Obrador quien no quiso hablar con ella.
En su cuenta de Twitter @lopezobrador_ Andrés Manuel declaraba que: "Las confesiones de Fox de que cargó los dados y ahora las de Elba Esther no dejan duda del fraude del 2006 y del daño causado a México".
En el Panal se cuecen todo tipo de habas. La diputada más joven del Estado de Chiapas y Presidenta de la Comisión de Juventud y Deportes y Secretaría de la Mesa Directiva twitteaba "@SilviaArely: Que orgullo que el Partido nos nombrara a mí y a 6 diputados más Consejeros Nacionales"

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