viernes, 25 de marzo de 2011

Indígenas campesinos chiapanecos desarrollan modelo de manejo de bosques que les
permita vivir y preservar sus áreas verdes


Gabriela Coutiño
Tuxtla Gutiérrez, Chis. 24 Marzo.- En el poblado de Teopisca, en la región de Los Altos de Chiapas, invadidos por el dulce aroma de pinos y bosque húmero, campesinos comuneros, acompañados de la delegación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), determinaron desde hace 10 años, buscar desarrollar un modelo de manejo de bosques que les permita vivir y preservar sus áreas verdes.
En una extensión de más de tres mil hectáreas, los comuneros de Teopisca manejan de manera sustentable sus bosques de coníferas, y aunque se trata de un negocio de talar bosques y vender madera, se lleva un minucioso control de los árboles derribados y los replantados, explicó Carlos Santiago León, jefe de la Unidad de Recursos Naturales de la Semarnat.
Los comuneros de Teopisca del 2000 al 2010, contaron con la autorización de la Semarnat de aprovechar de 625 hectáreas, la que vendieron en troncos, lo que les trajo grandes beneficios económicos, convirtiendo la preservación de bosques en moneda de cambio.
“Lo primero que se busca es cuidar el bosque, porque el bosque es el que nos da trabajo, y nos ha llevado al progreso a la mayoría; hasta compramos un rancho en el municipio de Venustiano Carranza, donde sembramos maíz y otras cosas”, comentó Pablo Gómez Gómez, comisariado ejidal.

Los líderes comunales como Mónico Silviano González Gutiérrez, señalaron que la protección de sus bosques le ha permitido a los comuneros reinvertir sus ganancias, por lo que ya están pensando en instalar un aserrado que les permita la comercialización directa de la madera.
Mientras tanto, los comuneros que buscan no depender de los fondos gubernamentales adquirieron una pequeña maquinaria para aprovechar las varas de los arboles enfermos, los que pueden ser utilizados como palos de escobas y trapeadores, entre otros.
“Hay muchos árboles que la propia técnica nos dice que están viejos y no van a crecer más, no van a dar más”, comenta Carlos Santiago titular de la unidad de Recursos Naturales de la Semarnat.
“Los árboles viejos ya no procesan el oxígeno, ya no sirven para capturar carbono, tienen que ser árboles jóvenes”, agregó.
Luis Fernando Torres García, encargado del despacho de la delegación estatal de la Semarnat, informó que durante el presente año la dependencia ha entregado 17 refrendos de autorización de aprovechamiento forestal maderable, a igual número de comunidades de ejidatarios y pequeños propietarios de las regiones; Altos, Fronteriza, Centro y Norte de Chiapas.
Los ejidatarios y pequeños propietarios beneficiados indicó, cumplieron su primer ciclo de corta en el 2010, y otros durante este año, colocando a Chiapas como el octavo productor forestal a nivel nacional con más de 5 mil 258 hectáreas bajo manejo.
“Con esta actividad se evita el cambio de uso del suelo de terrenos forestales para actividades agropecuarias y la tala clandestina que representan una de las principales causas de la disminución de los bosques en la entidad”, destacó.
Además, se rejuvenecen las masas arboladas y se protegen de los incendios y plagas forestales, esto en beneficio de la ecología ya que al mantener áreas bajo manejo forestal, existe la permanencia de cobertura vegetal y los servicios ambientales que ésta genera, además crea un hábitat para la vida silvestre de la región, incluso algunas especies retornan a estos predios por la permanencia de la cobertura forestal, aseguró el funcionario.

Torres García explicó que en el caso de Bienes Comunales Teopisca, se estarán aprovechando 34 mil 263 metros cúbicos rollo total árbol en una superficie de 625 hectáreas, mayoritariamente de pino y encino.

“A través de este proceso, los productores realizan diversas acciones y procedimientos que tienen por objeto ordenar el cultivo, proteger, conservar y restaurar los recursos forestales de un ecosistema, considerando los principios ecológicos con pleno respeto a la integralidad funcional e interdependencia de recursos naturales”, apuntó.

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