periodicociudadrealhoy

Arely Madrid Tovilla reconoció que el obispo emérito de San Cristóbal, Samuel Ruiz García
fue un ícono del indigenismo mexicano, por lo que debe
seguirse su lucha social


Cosme Vázquez /ASICh
La presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado de Chiapas, diputada Arely Madrid Tovilla reconoció que el obispo emérito de San Cristóbal, Samuel Ruiz García fue un ícono del indigenismo mexicano, por lo que debe seguirse su lucha social.
Entrevistada durante el receso de la sesión donde se atiende la Glosa del IV Informe de Gobierno, lamentó la muerte del obispo y envió sus condolencias a la iglesia católica y a los chiapanecos que sufren la pérdida física.
Lo mejor de cada ser humano es la huella que pueda dejar, por lo que consideró que la vocación que tuvo el obispo emérito de San Cristóbal en la defensa de los más necesitados se debe continuar, porque también es una convencida de que siempre hay que estar del lado de quien te necesite.
Aseguró desde la política y la vida social que se vio siempre en Samuel Ruiz a un actor responsable, a un luchador social y sobre todo, una persona que pugnó por la paz en Chiapas.
Madrid Tovilla señaló que su labor del obispo dio resultados con mayores coincidencias por mantener las cosas a favor de los indígenas y a favor de Chiapas.
Indicó que la lucha reivindicadora de los pueblos siempre tiene que reivindicarse, porque nunca acaban, y la lucha de los indígenas tiene más de 500 años, y en una tierra tan necesitada como la nuestra sigue habiendo retos.
Durante muchos años Monseñor Samuel Ruiz García fue juez, consejero y hombre sabio en su discernimiento, contribuyendo siempre a la paz en nuestro estado, afirmó.
La legisladora expuso que durante su liderazgo de servicio en la iglesia católica, además de promover la cultura entre los pueblos indígenas logró con su tarea la formación de diáconos, la prioridad dada a las necesidades de los pobres y excluidos y la promoción de organizaciones comunitarias. ASICh