miércoles, 28 de marzo de 2012


CAFÉ PARA TODOS

Alberto Carbot


* EL PAPA BENEDICTO XVI IMPUSO UN ESTILO MUY DIFERENTE AL DE JUAN PABLO
* EL IFE EXIGE A LOS PARTIDOS CUMPLIR CON LA CUOTA DE GÉNERO



Sin duda alguna la visita de Benedicto XVI a México confirmó qué el país es eminentemente católico, no importa que en la última década -según cifras oficiales-, haya caído más de un 4 por ciento la cifra de creyentes de esa religión y se haya duplicado la cantidad de fieles protestantes.
A pesar de no ser un hombre carismático ni cálido, sino más bien frío, y de que no es tanto un líder como sí un intelectual, Joseph Ratzinger fue aclamado por multitudes delirantes que le salieron a su paso y colmaron todos sus actos litúrgicos en Guanajuato.
La razón es que su investidura impone frente a los mexicanos, y quizá también que nuestros compatriotas están ávidos de alguien en quién creer, deseosos de un guía, un dirigente, pues los políticos los han defraudado una y otra vez y cada vez están más desacreditados.
Se calcula que entre 2 y medio y 3 y medio millones de personas salieron a ver a las calles al jefe de la Iglesia católica.
Sólo habría que ver las multitudes que se congregaron en las vallas desde el Aeropuerto del Bajío en Silao hasta León, para darse cuenta de que la visita de Ratzinger fue un éxito. Los organizadores calculan que al menos 700 mil personas se apostaron en las vallas.
La cifra sin embargo fue superior en el trayecto de 56 kilómetros que el Papa hizo desde León hasta Guanajuato, la mayor parte del cual se realizó a bordo del "Papamóvil".
Ahí se estima que fueron un millón los fieles que salieron a verlo con la esperanza de al menos recibir una bendición colectiva, de que simplemente, al menos dirigiese su mirada hacia ellos.
La devoción de los mexicanos no sólo hacia la virgen, hacia Dios o hacia una figura religiosa es increíble. Algo hay en su alma colectiva que se entrega sin reservas y eso lo saben los políticos que se aprovechan para usar a los ciudadanos para nutrir sus redes clientelares.
Luego de los 4 días que el Sumo Pontífice estuvo entre nosotros, habrá qué decir, sin embargo, que las comparaciones son odiosas pero necesarias.
A pesar de la calidez y de la euforia y júbilo que suscitó el obispo romano, los mexicanos le tributaron aún mayor cordialidad a su antecesor Juan Pablo II.
Quizá las diferencias sean de matiz pero son muy palpables. Por ejemplo, quienes han visto de cerca a ambos pontífices, han confesado que éste es muy diferente.
Juan Pablo II irradiaba un gran carisma, era un enorme comunicador. Sabía ganarse la simpatía de todos. Era, de muchas maneras, como un mexicano. Por algo el mismo solía decir que ya era mexicano.
En cambio Benedicto, por mucho que intentó acercarse a los mexicanos, no pudo superar esa actitud hierática e indiferente.
Se notó mucho por ejemplo, cuando sobrevoló en un helicóptero de la Fuerza Aérea Mexicana, el santuario al Cristo de la Montaña. Su actitud era más bien fría y meditativa. Es un hombre con un cerebro más grande que el corazón.
Juan Pablo II era lo contrario. Por eso era tan emocional y no gustaba de ser demasiado racional.
HUBO MULTITUDES, PERO NO GANANCIAS
Hasta los vendedores ambulantes de León -quienes se mostraron decepcionados porque la visita Papal atrajo multitudes pero no ganancias, pues las autoridades bloquearon la carretera con Guanajuato, lo que impidió que pudiesen desplazarse-, comentaron que Benedicto XVI no posee el carisma de Juan Pablo, pues "con el otro Papa todo se vendía".
Quizá resulte un tanto exagerada esta apreciación. En realidad, las ganancias esperadas de las autoridades no llegaron, precisamente por que se creó un ambiente de exagerada seguridad; se colocaron demasiados retenes y se cortó la ruta entre las dos principales ciudades que visitó el Papa y así no pudo haber turismo.
Quizá ese sea el único saldo negativo de la visita de Benedicto XVI, pues en general, su visita estuvo más o menos bien organizada, con excepción de las arbitrarias medidas adoptadas por el Estado Mayor en la misa que tuvo lugar en el Parque Bicentenario.
Mientras a las personas de las zonas Vip se les regalaban botellas de agua para que estuvieran debidamente hidratadas -a pesar de que algunas gozaban de áreas de sombra-, a los fieles de las orillas se les prohibió la compra del líquido desde las 9 horas hasta el fin de la misa, al mediodía, cuando ya el calor era insoportable y la temperatura sobrepasaba los 32 grados centígrados.
Es decir, que hay católicos de distinta categoría: unos de primera y otros de segunda. No es por ello casual que algunas personas sufrieran calambres, insolación, desmayos, problemas estomacales e incluso algunos bebés se deshidrataran.
El argumento infantil esgrimido por los encargados de la seguridad del evento, es que tal vez podían usar las botellas como proyectiles. ¿Y las personas de la zona Vip, entre ellas los candidatos presidenciales, no? ¿Ni siquiera Andrés Manuel López Obrador, quien con sus actos de protesta provocó el caos -además del cierre de negocios-, mientras sus huestes vandálicas "ocupaban" Reforma?
Esos detalles empañaron un poco la organización, que pudo ser impecable, porque el manejo de multitudes suele ser todo un reto en cualquier circunstancia.
Para abundar entre las diferencias entre Juan Pablo y Benedicto habrá qué reparar también en su discurso.
Karol Wojtyla solía ser un hombre con un mensaje abierto, de claro acento político, al que incluso no le importaba provocar polémicas. Por algo en parte se le atribuye el mérito de haber propiciado la caída de la "cortina de hierro" en Europa del Este.
El Papa Juan Pablo II, aunque igual de conservador que Benedicto XVI, era un hombre que llamaba al "pan pan y al vino vino".
Por eso en sus mensajes solía denunciar a los enemigos de la Iglesia. Lo mismo defendía las posturas contra el aborto y la anticoncepción, que condenaba los autoritarismos y totalitarismos de todo signo. Además, se solía dirigir no sólo a la grey católica sino a toda la humanidad, aún a esa gran porción que no está bajo la égida de la Iglesia católica.
Pero Benedicto XVI es un hombre mucho más cuidadoso. Sus discursos son muy cuidados, muy teológicos, muy bien redactados, pero muy sesgados. A diferencia de su antecesor, evita ser directo.
Seguramente -una vez que plasma sus primeras impresiones-, dedica mucho tiempo a pulirlos, porque a diferencia de Juan Pablo II, personalmente digita cada palabra, prácticamente sin el auxilio de su grupo de asesores.
Otro elemento que Benedicto deja traslucir en sus mensajes, es su preocupación por los laicos, obispos y sacerdotes ubicados dentro de la Iglesia, pero no habla demasiado de quienes están fuera de ella o los que la heterodoxia ha segregado. Esto quedó muy claro en su mensaje ante los obispos del Consejo Episcopal Latinoamericano, el domingo pasado, en la catedral de León.
Ciertamente, pidió hoy a los obispos latinoamericanos estar "del lado de quienes son marginados por la fuerza, el poder o una riqueza que ignora a quien carecen de casi todo", pero lo hizo pensando en la actitud piadosa que deben asumir los prelados y no tanto en el resto de los creyentes.
Es obvio que Benedicto XVI se preocupa mucho porque la milenaria Iglesia católica -"Imperio" la llaman algunos-, prevalezca fuerte por muchos siglos más.
Por ello, se entiende que su visita a América Latina no fue gratuita. Sabe que aquí se halla la mitad de los católicos a nivel mundial y que no debe de descuidar a esta parte de su rebaño. Juan Pablo II además de estar consciente de ello, se preocupaba por sumar a otros más a su Iglesia.
Quizá pocos lo notaron, pero Benedicto XVI quiso imponer su sello personal en esta visita y mostrar que aunque empuña el mismo báculo de San Pedro que su antecesor, lo hace de diferente manera que Juan Pablo II.
GRANOS DE CAFÉ
El pasado 30 de noviembre, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) modificó el Acuerdo del Consejo General del Instituto Federal Electoral) por el que estableció los criterios aplicables para el registro de candidaturas a distintos cargos de elección popular que presenten los partidos políticos o las coaliciones, para el próximo proceso electoral federal y estableció que las listas de candidatos por el principio de representación proporcional deberán ser integradas por el mismo género.
A pesar de haberlo dado a conocer en tiempo y forma a los partidos políticos, éstos no lo tomaron en cuenta y presentaron sus listas sin respetar el porcentaje 60-40 establecido por el TEPJF, por lo que ante la decisión dada a conocer el pasado lunes por el Consejo General del IFE -en cuanto a la obligación de cumplir con la resolución-, el PRI, PAN y PVEM señalaron que no podían acatarla ante su "imposibilidad material y jurídica", por lo que se declararon incapaces de registrar un mínimo de 120 candidatos propietarios y suplentes para diputados y 26 para senadores de un mismo género.
Por ello, el Consejo General del IFE llevó a cabo una sesión extraordinaria, en la que aprobó por unanimidad, el acuerdo por el que se inició un procedimiento especial en contra del PAN, PRI, PT, PVEM, Movimiento Ciudadano y las coaliciones Compromiso por México y Movimiento Progresista, por incumplir con lo establecido en el artículo 221 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (COFIPE), referente a incluir en sus candidaturas la cuota de género.
Les solicitó que en el plazo de 48 horas, rectifiquen las solicitudes de registro de sus candidaturas a diputados y senadores por el principio de mayoría relativa y representación proporcional, según corresponda.
En caso de no hacerlo, se harán acreedores a una amonestación pública y una vez transcurrido el plazo, el partido político o coalición que no realice la sustitución de candidatos, recibirá una amonestación pública y si a pesar de ello continúan incumpliendo la orden, se les exhortará para que en un plazo de 24 horas -contadas a partir de la notificación-, hagan las correcciones.
En caso de reincidencia se les sancionará con la negativa del registro de sus candidaturas.
Los partidos políticos tienen hasta las 14:15 horas de hoy miércoles, para realizar ajustes en sus listas de candidatos a diputados y senadores a fin de cumplir con la cuota de género que exige la ley. A ver qué determinan…
…Sin duda que las acciones implementadas por la organización civil "Tapachula en Movimiento SCH 2012", que encabeza el diputado con licencia Samuel Alexis Chacón Morales, ha podido beneficiar a mil de habitantes de las zonas más desprotegidas de la zona.
Tan solo la semana pasada, más de 800 familias fueron atendidas por la brigada médica en la que participan de forma altruista, médicos especialistas que simpatizan con esta cruzada. Ahí se hizo entrega de medicamentos gratuitos y se brindó servicios de odontología, medicina general, telemedicina y ginecología, entre muchos otros servicios.
Samuel Alexis Chacón Morales, destacó la importancia de seguir apoyando a la población de escasos recursos económicos, y fue receptor del reconocimiento de la gente.
"Le agradecemos todo el apoyo que nos brinda, porque a diferencia de otros políticos, él sí ha hecho mucho por nosotros. Por eso me gustaría que su trabajo continuara, que no se quedara solamente como diputado, porque sabemos que es una persona sensible a las necesidades de la ciudadanía", señalaron los tapachultecos.
Integrantes de la organización civil "Tapachula en movimiento SCH 2012", subrayaron que la agrupación esta comprometida a trabajar en beneficio de la sociedad. Además de servicios médicos, se brinda orientación jurídica y apoyos educativos, entre otros…
…Sus comentarios envíelos vía internet a la dirección gentesur@hotmail.com

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