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POLICIAS FEDERALES IRRUMPEN EN ALBERGUE PARA MIGRANTES EN CHIAPAS

*Director del albergue para menores y jóvenes migrantes «Todo por Ellos»

Gabriela Coutiño

Tuxtla Gutiérrez, Chis., 28 JUL.-Policías de la división de fuerzas federales irrumpieron la medianoche del sábado en el refugio para jóvenes migrantes “Todo por Ellos” que se ubica en el municipio de Tapachula, denunció su director José Ramón Verdugo Sánchez.

Los policías fuertemente armados descendieron de una patrulla, encañonaron a los jóvenes que se encontraban afuera de la casa quienes corren al interior. Después de empujarlo, los policías ingresaron al albergue, se metieron a los cuartos revisando todos los rincones sin que exhibieran una orden de cateo, dijo Verdugo Sánchez.

El activista explicó que al pedirles que mostraran la orden de cateo los policías lo empujaron, lo amenazaron y empezaron a decirle que había denuncias en contra de la casa por lo que no necesitaban presentar la orden de cateo, porque eso no era un albergue y la ley les asistía y ellos podían hacer todas las verificaciones que creían conveniente”.

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Los cinco policías se hacían acompañar de una persona vestida de civil a la que llamaban licenciado, dos más los esperaban en el vehículo, agregó el activista. 

Desde hace tres semanas indicó, la casa ha estado vigilada por hombres desconocidos, además que en días anteriores fue seguido por una camioneta con vidrios polarizados.

José Ramón Verdugo señaló que la irrupción de la policía sin una orden judicial al albergue, es una medida de represión por las denuncias públicas que ha venido haciendo en contra de las autoridades que solapan la Trata de personas.

Además ha denunciado como el ayuntamiento priista de Tapachula cobra una cuota a los menores que venden chicles y cigarros, y a los boleros legitimando con ello el trabajo de menores en su mayoría migrantes centroamericanos y indígenas de los Altos de Chiapas.

El albergue “Todo por Ellos” funciona desde hace cuatro años en Tapachula, en un principio era un comedor comunitario que brindaba alimentos a niños y adolescentes en situación de calle, pero debido al gran número de jóvenes vulnerables con necesidad de alimentación y refugio, la casa se convirtió en un albergue.