El Consejo Estatal de Derechos Humanos del Estado de Chiapas viola sus propios procedimientos.
Su actuar no permite la defensa de las victimas.
El artículo 16 de la Ley del Consejo Estatal de los Derechos Humanos del Estado de Chiapas estipula que todas las actuaciones y procedimientos que se sigan ante el consejo deberán ser expeditos. Entonces nos podemos preguntar y asustar en cuanto a los verdaderos tiempos de trámites que necesitan para emitir recomendaciones.
El caso que nos preocupa es el CEDH/0580/2011. El día 4 de julio 2010 se realizaron sendos operativos de la Policía Estatal Preventiva y la Policía Sectorial en el crucero Nuevo México, a 3 Km. de la cabecera municipal de Comalapa y en Tecpatán. Los manifestantes estaban protestando por la falta de soluciones efectivas a los damnificados del Tapón del Grijalva contra del gobierno del estado y el federal, quienes no habían cumplido. Los policías llegaron disparando al aire y rociando gas lacrimógeno. Detuvieron de manera totalmente arbitraria a 23 personas.
Cabe destacar que varios de los detenidos fueron víctimas de diversas agresiones físicas por parte de los policías que los detuvieron: uno de ellos, Santos SALAS VAZQUEZ de 60 años, aún presenta quemadura por encendedor en el codo izquierdo y le fueron golpes en distintas zonas del cuerpo, como la pantorrilla y la nuca, a pesar que no opuso resistencia física al momento de la detención. Otros más fueron golpeados en estómago y mejillas con fines interrogatorios.
Casi dos años y aun no hay ningún avance
Es muy preocupante este caso, puesto que es importante señalar que todos los presos salieron totalmente libres e inocentes, gracias a los diversos amparos, después de casi dos años, que la Limeddh demostró en litigio todas las graves violaciones a los derechos humanos.
Pero dos años, al parecer no fueron suficiente para permitir al Consejo Estatal de Derechos Humanos del Estado de Chiapas de cumplir con su función, es decir, emitir una recomendación en relación a este caso.
Deploramos la negligencia, la falta de comprensión que caracteriza el personal que laboran en esta institución. Se supone que representan el órgano que debe proteger y dar protección a las victimas de violaciones de derechos humanos. Y lo único que constatamos es una profunda negligencia que da impunidad, como única respuesta.
No se puede tolerar más este tipo de comportamiento que es el reflejo exacto de la sociedad mexicana hoy día. Es necesario combatirlo y exigir respuestas adecuadas y sobre todo respuesta en tiempo por parte del Consejo Estatal de Derechos Humanos del Estado de Chiapas.
Porque justicia que llega tarde, no es justicia.
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