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Ciencia y tecnología, medios para el desarrollo

· El efecto de ambas actuando conjuntamente es muy superior a la suma de los efectos de cada una actuando por separado.

Manuel Solis, Agencias.-
Los presupuestos dirigidos a la ciencia y tecnología, que sirven para poder medir el grado de desarrollo de un país, no han tenido el respaldo que dicho sector merece. Algunos expertos advierten que rubros como la ciencia e investigación, así como la tecnología, pautan el desarrollo y la innovación de los países.
Existen en la actualidad muchas perspectivas de la situación como casos personales que sirven para ilustrar la situación en la que se encuentra el futuro de la investigación en nuestro país. Afortunadamente las universidades no han quitado el dedo del reglón y han apostado a invertir en las propuestas que los investigadores hacen.
Bien ha hecho en señalar en varias ocasiones el senador con licencia, Manuel Velasco Coello, cuando exhorta a los gobiernos a apoyar a la ciencia y la tecnología para poder frenar las llamadas fugas de cerebros, ya que México cuenta con científicos e investigadores de excelencia que, en otros tiempos, al no ver el apoyo que requerían recurrían a países desarrollados como Estados Unidos y Alemania para que les brindaran respaldo, dejan un amargo sabor de boca a los mexicanos.
Sin embargo, si no hay perspectivas ni apoyos, aquellos que pueden y tienen posibilidades, y ganas de irse fuera, lo hacen. Hay casos en los que el empeño y la necesidad se convierten en acto de justicia. Ello nos da una idea de cómo está el panorama en el ámbito de la investigación, la ciencia y el desarrollo tecnológico. Aunque las buenas intenciones sean plausibles, es inviable que un sistema pueda sostenerse con este tipo de gestos y proezas.
En pleno siglo XXI, quedan fuera de duda los beneficios que las diferentes innovaciones tecnológicas han proporcionado a la sociedad a lo largo de los siglos. Por ejemplo, Internet es quizás una de las tecnologías de última generación que más rápido se renueva, así como la ciencia es clara y es una guía práctica con que los seres humanos disponemos para hacer frente a los problemas globales.
Así, la ciencia y la tecnología han dado herramientas importantes al hombre para demostrar su inconformidad, para expresarse, para regalar curas a males terribles, esto pese a uno de los tópicos que buscan debatir sobre si la ciencia y la tecnología han servido para configurar a las sociedades modernas y trasformar a las tradicionales.
Lo que es cierto es que la ciencia y la tecnología no se pueden estudiar fuera del contexto social en el que se manifiestan. Tanto la ciencia como la tecnología mantienen una simbiosis y el efecto de ambas actuando conjuntamente es muy superior a la suma de los efectos de cada una actuando por separado.
Ya el «Güero» Velasco expresaba que la ciencia y la tecnología han tenido tanto auge y desarrollo que una realidad inamovible es que lo que une a la ciencia y la tecnología con la sociedad son las necesidades y los deseos de la sociedad.
Hoy en día, la ciencia y la tecnología forman parte del sistema de vida de todas las sociedades. Ambas se están sumando a la voluntad social y política. Es decir, que la ciencia y la tecnología están proporcionando a la sociedad una amplia variedad de opciones en cuanto a lo que podría ser el destino de la humanidad.
Los beneficios que trae la tecnología y la ciencia al desarrollo del ser humano y de un país son numerosos. El apoyo de los poderes de gobierno es imprescindible, aunque no por ello se deben dejar de contemplar alternativas como las fundaciones y el apoyo de proyectos con capital privado. Sin olvidar propuestas que piden a las cámaras de senadores y diputados destinar una partida firme a la tecnología y la ciencia. El futuro la ciencia y de la investigación depende de ello.