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Chiapas:
IGNOMINIA PUBLICITARIA
Augusto Solórzano López







El secretario de turismo de Chiapas Juan Carlos Cal y Mayor Franco elevó varios pisos a su apilada columna de bonos desde que confió a un servidor que hay que hacer descansar a la población de tanta publicidad simulada (y hasta ofensiva) como la más reciente que, con doble intención se cuelga el apellido "Valls" y en el fondo con letras muy pequeñas y prácticamente invisibles a simple vista el nombre de una legisladora, Mari Carmen.
La lectura de esto que de acuerdo a Cal y Mayor es otra ofensa y una flagrante violación a las leyes, normas y conductas preelectorales que la Cofel, por extraños motivos se niega a frenar, poner orden y un hasta aquí, quizá, porque a estas alturas pudiera ya estar rebasada.
Lo que me extraña y bastante es que detrás de la Cofel en Chiapas, se encuentra Don Erik Alejandro Ocaña Espinosa, como presidente de quien no dudamos de su probidad, pero, además dispone de un equipo suficiente y profesional.
Por lo que quiérase o no, asalta la duda y la inquietud.
Pero independiente de esas faltas de respeto al electorado, sociedad y a la población en general de Chiapas, que, en su momento puede polarizar lo ya polarizado. Aún hay más.
Estamos inundados de gallardetes por cientos de miles en toda la ciudad, además de espectaculares, tantos, que por cada diez metros o menos hay uno. Quiero decir, Tuxtla Gutiérrez, como otras ciudades, está tapizado de tanta publicidad que, ya no cabe más.
En una contaminación publicitaria muy baja por lo que respecta a publicidad comercial, pero, muy alta en cuanto a partidos políticos, gobierno, de informes, de este o de aquel en donde todos se pusieron de acuerdo para ensuciar la ciudad a más no poder y ya llevamos cinco años.
La contaminación de publicidad oficial tan profusa que a cualquiera saca de quicio y para decirlo de un modo más coloquial…la verdad…la verdad…ya nos tienen "hasta la madre"…como acertadamente nos refresca seguido, Javier Sicilia.
Es vieja aquella frase que dice "todo con medida…nada con exceso"; eso es lo que está ocurriendo en Chiapas desde hace buen rato, pero, al revés y qué lástima que quien debe moderar la situación es el que pone la cuota mayor de publicidad.
Corriendo los correspondientes riesgos a lo mejor asimilaríamos tan extremo "cacaraqueo" si tal como dijo alguna vez Santa Teresita de Jesús…(palabras más, palabras menos) "Que lo que diga tu boca, lo digan tus actos".
En el caso en particular y siendo rigurosamente honestos, todo el aparato publicitario y sus huecas y sesudas lucubraciones traducidas en el auto elogio de una "excelente publicidad institucional", contrasta en todo con lo que, nos pretenden vender.
La publicidad va en una dirección y los Políticos, funcionarios y gobierno circulando en sentido contrario. Chocan y en suma la dizque publicidad en vez de ayudarles les perjudica.
Es decir que las frases que buscan convencernos para ubicar en todo lo alto al gobierno del estado. Lamentablemente no logra su objetivo y deja eso sí, muy mal parado a quien debiera casi, casi, estar en un pedestal, según ellos. Así como a los demás protagonistas.
El pueblo naturalmente que está molesto, porque, esta viendo que Su Dinero, se está derrochando en pura basura y pintura que con facilidad podría aplicarse en vialidades, estacionamientos y abrir las calles en vez de cerrarlas y colocar "bancas" para sentarse a pleno sol al mediodía.
Es posible que mis expresiones que no tratan de molestar a nadie, sino, llamar a la cordura y al buen entendimiento, les caiga como "patada en el estómago" a quienes se han vuelto millonarios haciendo basura que ellos le llaman "publicidad institucional".
Son riesgos del oficio…sin embargo me atrevo a asegurar que la mayoría de quienes lean estas líneas estarán de acuerdo conmigo, bien que lo que expresen, bien que no. Lo importante, es hacer uso de la libertad entre las libertades.
Por lo que, dejando abierta las posibilidades de mejores y por supuesto más valiosas opiniones que sin duda las hay, propongo, que tal como dice Juan Carlos Cal y Mayor, si no tenemos nada que esconder, nos sometamos al escrutinio del conglomerado de más de 4 millones y medio de chiapanecos...
Y que el gobierno, municipio y demás implicados declare un alto y ordene la limpia de tanta ignominia publicitaria y haga que tanto el turismo, nacional, internacional y nosotros como chiapanecos, descansemos un poco de tanta basura que ya no sirvió, para nada.